Del 25 al 27 de Abril, se han reunido en su ineludible cita anual, medio centenar de socios de OLEARUM. En esta séptima edición ha sido Salamanca la anfitriona, concretamente el Museo del Aceite “El Lagar del mudo” ubicado en San Felices de los Gallegos.
En este foro nos han dado la oportunidad de exponer nuestro proyecto, una ponencia que hemos titulado “Oleocultura y Calidad, forjando un futuro”, un recorrido por todas las acciones que hemos desarrollado durante estos cinco años en pro de la cultura del AOVE , con un claro mensaje de necesidad de seguir trabajando para formar e informar a toda la sociedad sobre las bondades y verdades de nuestro preciado Zumo de Aceituna. Hemos intentado transmitir, por encima de todo la ILUSIÓN con la que concebimos Soleae y con la que cada día, poco a poco hemos ido desarrollando nuestro camino. Tras las ponencias técnicas, desarrollamos una cata de nuestros tres AOVEs.
En este marco, nos han hecho entrega del V PREMIO AGUSTÍ SERÉS “In Memorian” que otorga la familia Seres, propietaria del Molí de Cal L’Agustí. Uno de los premios nacionales más importantes, que busca reconocer la labor, individual o colectiva, de promoción y difusión de la cultura del aceite de oliva realizada en el territorio español en los últimos 3 años. Se valora especialmente la originalidad y los recursos empleados, siendo prioritarias aquellas actuaciones que sin grandes medios comporten un mayor compromiso de los implicados en la iniciativa.
Como conclusión el jurado de dicho premio ha valorado (se cita textualmente):
“Proyecto joven e ilusionado, que recoge plenamente el espíritu que inspira el premio Agustín Seres “in memoriam”. Con un reconocimiento a su comprometida y amplia labor en pro de la cultura del olivo y del aceite de oliva virgen extra de calidad, en un entorno de olvidada tradición olivarera y difícil acceso.
Se trata de un proyecto que valora mucho el aceite de oliva virgen extra de calidad, destacando la transparencia y frescura de un proyecto, donde conviven el respeto por el medio ambiente, la producción ecológica y la recuperación de variedades autóctonas, junto a una importante carga de responsabilidad social y voluntariado, con catas dirigidas y jornadas temáticas sobre el aceite de oliva virgen extra y el arte contemporáneo.
Con recursos limitados, en una ubicación geográficamente poco favorecida, con amplia visión de la cultura del olivo y del aceite de oliva virgen extra e incursión en ámbitos culturales poco trabajados (arte moderno). Sin dejar de lado y adentrándose en el apartado lúdico de la gastronomía, tanto tradicional, como de vanguardia, en el oleoturismo sostenible, siendo esta una apuesta por la calidad con espíritu solidario. Recuperando tradiciones. “
Queremos agradecer, en primer lugar, a la familia Seres por su iniciativa personal y en particular por la convocatoria de este premio que pone en valor el esfuerzo de grandes iniciativas dotadas con pocos recursos, proyectos en pro de la cultura del AOVE.
Agradecimiento especial a nuestra FAMILIA, que nos apoyó desde la primera aceituna, probó nuestro primer zumo, se enamoraron e ilusionaron con nosotros y han empujado con fuerza este barco. Sin duda se merecen este premio tanto como nosotros, por que como nosotros sufren los contratiempos de este sector.
Nos sentimos como pequeñas hormiguitas, construyendo grano a grano otra realidad. Una realidad donde el AOVE tenga el sitio que merece, sea valorado y conocido en plenitud y consumido con alegría. Pues la situación en la que nuestro sector se encuentra bien parece "El mundo al revés" y tenemos una gran responsabilidad para REVERTIR esta realidad, con la que batallamos todos los días. Por ello, desde aquí, invitamos a las administraciones y entes públicos, en especial a los de la comunidad en la que nos encontramos, a dar la vuelta a esta tortilla, porque la OLEOCULTURA no es solo la cultura del olivo y su fruto, la oleocultura es también nuestra gastronomía, es la dieta mediterránea y es, por encima de todo, una forma de entender la vida.
Porque el apoyo del olivar, mal llamado "residual", de zonas como la nuestra, va mucho más allá de la rentabilidad económica,
- significa conservación de un paisaje, modelado con mucho esfuerzo por nuestros antecesores.
- significa conservar usos y costumbres asociados a este cultivo,
- significa asentamiento de población en el medio rural,
- en definitiva significa CONSERVAR UN PATRIMONIO CULTURAL QUE NOS HAN LEGADO.
Y como nadie es profeta en su tierra, esto todos lo sabemos, nosotros nos hemos sentido muy queridos y arropados por Oleicultores con olivos y sin ellos, siempre que hemos tenido la oportunidad de aprender y compartir en reuniones, congresos, ferias... Un GRACIAS ENORME a la generosidad inmensa del sector, técnicos, catadores, productores, todos aquellos que nos han formado y transmitido la pasión por el AOVE.