Se trata de una exposición muy interesante compuesta por 20 instantáneas que muestran asombrosos rostros esculpidos en árboles milenarios de la Sierra de Tramuntana (Mallorca). Se puede visitar en la Fundación Setba, hasta el próximo 22 de febrero.
¿Alguien se ha parado a pensar alguna vez en los secretos que encierran los olivos milenarios? Estos monumentos vivos, de gran valor cultural, sumergen sus raíces en la Cuenca del Mediterráneo. Son “obras de arte” con más de mil años de historia, que poseen una gran belleza escultural admirada por todos cuantos las divisan.
Observándolas con detenimiento, placidez y sosiego, estas formaciones de troncos retorcidas dejan de ser quebrados de formas caprichosas y se convierten en perfiles, caras o cuerpos de unas criaturas difíciles de perder de vista. Eso es, precisamente, lo que tres intrépidos amigos expresan a través de El rostro de los olivos.
Se trata de una exposición que se ha forjado a lo largo de diez años durante los que el historiador Pere Ferrer, el economista José Sedano y el cineasta Daniel Ferrer han fotografiado rostros que, con el paso del tiempo, se han ido esbozando sobre los árboles milenarios que habitan en la Sierra de Tramuntana de Mallorca.
Idílica y "milenaria" historia
Todo empezó como algo casual. Un día cualquiera estos tres camaradas salieron de excursión por la escarpada sierra mallorquina y hallaron un búho esculpido en el tronco de un olivo. A partir de ese momento comenzó una larga, pero gratificante, exploración. Empezaron así a inmortalizar las formas increíbles que estos ejemplares milenarios han sido capaces de adoptar.
El resultado es esta apasionante exhibición que, desde el pasado 15 de enero, se expone en las dependencias de la Fundación Setba. Sin duda, una muestra que inmortaliza los semblantes grabados en los olivos de la tierra insular que el tiempo ha ido dibujando a lo largo de infinidad de años y que, probablemente, también acabará por borrar.
El rostro de los olivos se compone de una veintena de imágenes de gran formato de estas obras de arte efímeras, fraguadas muy lentamente. Una muestra slow que comparte “raíces” con el movimiento Slow Food basado en la protección de los productos estacionales, frescos y autóctonos del acoso de la comida rápida; así como en la defensa de los intereses de los productos locales.
Horarios, precios y cata
Cualquier persona puede recrear su vista con estas magníficas ilustraciones, de lunes a viernes, desde las 10:00 hasta las 14:00, en horario de mañana; y desde las 16:30 hasta las 20:00, en horario de tarde. Para acudir los sábados es necesario pedir cita previa.
Dirigida a todos los públicos, el precio de entrada a esta “reposada” exposición es de 2 €, una simbólica cantidad cuyos beneficios se destinarán a proyectos sociales y culturales de la Fundación Setba.
Según nos han comunicado sus responsables, el día 19 de febrero, dos días antes del cierre oficial de la muestra, está previsto celebrar una cata de aceites de oliva vírgenes extra. Durante la misma, que tendrá lugar a las 19:00 horas, los asistentes podrán degustar diversos zumos de oliva, entre ellos, Ninou, un capricho muy exclusivo que la compañía Oleum Flumen obtiene de aceitunas Arbequinas.
Paralelamente a El rostro de los olivos, la Fundación organiza multitud de actividades como visitas guiadas, conferencias, etc, a las que podéis acceder a través de la web de la Fundación (www.fundaciosetba.org).
Título: El rostro de los olivos
Lugar: Fundación Setba
Plaza Real 10, 1º 2ª. 08002 Barcelona.
Fecha: del 15 de enero al 22 de febrero de 2013.