Nuestro querido amigo Manolo Piedrahita, Presidente de la Asociación AMigos del Olivo de Baena realizó una acertada crónica de este entrañable día de campo en la Subbética Cordobesa.
Brisas
ROMERIA A VIZCANTAR
M.Piedrahita/ Periodista
No iban carretas tiradas por bueyes ni algarabía de cantes y bailes. No hubo que vadear el Caicena en esta romería Nuestra meta no era una ermita con su virgen que adorar en la Andalucía de Machado, “la tierra de Chicuelo y de María”. En Priego, donde iniciamos la peregrinación, el romero mayor nos reconfortó con zumo virgen Señorío de Vizcántar, y nos ungió con óleo balsámico que suaviza el rostro. Fermín Rodríguez, que no portaba “sin pecado” ni báculo, nos guió hacia el paraje “Olivos Milenarios” propiedad de su familia. Caen cerca de Vizcántar, una loma cercana al antiguo caserío de ese nombre del municipio de Almedinilla, el diminutivo de Al-Medina, la ciudad en árabe. Los hemos venerado en el silencio de la Naturaleza, con el sonido melódico de las avecillas del campo, las que tanto amó San Francisco. Romería distinta, sin empujones ni griterío y sin andas que zarandear. Están clavados en la tierra estos troncos imponentes, arrugado por el paso del tiempo: muchas generaciones recolectaron estos árboles que han resistido lluvias y sequías, calores y heladas. A su sombra, niños y adultos, hemos santificado la peregrinación con viandas y buen vino; condimentadas según el arte culinario de aquí y de Marruecos. Aixa, la esposa de Fermín, nos ha servido más tarde té moruno con hierbabuena y pastelillos recién traídos de su patria berebere que saben a los nuestros de origen árabe. Comida, que yo no llamo “perol” sino romería, aderezada asimismo con buena conversación, organizada por Olearum, la asociación que defiende el patrimonio cultural del olivo mediterráneo.
El día 1 de junio de 2008 nos reunimos en Priego de Córdoba los socios de
OLEARUM con nuestras familias y amigos. Para esta ocasión, el anfitrión fue
nuestro gentil amigo Fermín que nos invitó a disfrutar de su tierra, sus paisajes, sus aceites y de su humanidad, llena de entusiasmo y poesía, aduciendo como argumento, que tampoco es malo si fuese el único, el compartir un “perol” en el anciano paraje de “Olivos Milenarios” propiedad de
su familia.
Pudimos disfrutar y compartir los allí presentes de un día de campo, de aceite y de buena gastronomía local; haciendo más fuerte el lazo de ilusión que nos une, y además disfrutar de la familia y estrechos amigos.
El aceite de Priego lo tiene todo: desde la tradición a la dedicación de sus
productores, agricultores y almazareros; la labor de su Consejo Regulador en encauzar esa ilusión de calidad, hacia todo el universo de amantes del aceite de oliva; y, por supuesto, el medio y material vegetal que atesora esta comarca cordobesa y el buen hacer de sus gentes.
La magia de lo que vivimos, como ocurre en todas las cosas buenas de la vida, está más que en las palabras, en las vivencias: el buen aceite como el buen vino hay que saborearlo donde se produce.
Y, hablando de vinos, la hermana comarca de reconocidos vinos, Montilla-Moriles, quiso para esta ocasión, de una forma discreta, sin protagonismos innecesarios, acompañar a esta comida con la generosidad y elegancia de sus vinos, tan apreciados en Priego de Córdoba. Su Consejo Regulador ha querido que, con sus vinos, el recuerdo de este día tenga las esencias y sabores
de sus vecinos cordobeses.
El programa de esta inolvidable jornada fue el siguiente:
11:00-11:30 Desayuno molinero en la sede de Aceites Vizcántar.
11:30-12:00 Presentación de la comarca y de sus aceites por el CR de la DOP de Priego de Córdoba y de la Ruta de los Olivos Milenarios por Fermín Rodríguez.
12:00 Partida al paraje de los Olivos Milenarios y visita.
Si las condiciones meteorológicas lo permiten, prepararemos entre todos el perol.
El punto de encuentro tuvo lugar en la sede de la empresa Aceites Vizcantar, de Fermín Rodríguez, que está situada en la Carretera de Zagrilla s/n. Se localiza poco antes de llegar a Priego de Córdoba, si venís desde Cabra, al pié de la Carretera A-340 Estepa-Guadix. Es un edificio de color rojo intenso. Aceites Vizcantar: 957 540266. http://www.aceitesvizcantar.com
Luis Navarro García
Asociación OLEARUM